Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino

s. Eduviges, duquesa de Polonia, religiosa

s. Eduviges, duquesa de Polonia, religiosa - Santo del día 16 de octubre

Santo del 16 de octubre

La verdadera realeza está en servir a los más pobres. Su amor a Dios y a los abandonados distinguió a s. Eduviges, primero como duquesa de Silesia y Polonia y después como religiosa en un monasterio cisterciense. Vivió entre 1100 y 1200. El 16 de octubre se celebra su memoria en toda la Iglesia.  
s. Eduviges, duquesa de Polonia, religiosa

Aunque si su noble figura se movía delicadamente dentro de un vestido de seda, y aún si coronaba su frente una elegante diadema con incrustaciones de rubíes, para Eduviges no era un problema acercarse a los necesitados y mostrarse caritativa. Proveer a los pobres era una práctica común para las mujeres nobles de la Edad Media. Para muchas, un gesto inspirado en un sincero impulso de piedad. Para otras, era solo un gesto formal dictado por una munificencia solo exterior. Pero ya sea que estas prácticas caritativas fueran realizadas por libre elección o por pura obligación, esas costumbres medievales eran una regla general, pero las reglas, incluso las del fuerte consenso social, estaban destinadas a ser rotas.

La riqueza de la pobreza

Efectivamente, la excepción tuvo un nombre: Eduviges, que alrededor de 1190 era una noble bávara que ya a los 16 años estaba destinada a contraer matrimonio con Enrique el Barbudo, heredero del ducado de la Baja Silesia. Desde el principio, la joven duquesa, que pronto sería madre (tendrá seis hijos), encarnó entre sus súbditos el más bello ideal de una reina: no será solo con la ropa material, sino con el terciopelo de su constante generosidad que Eduviges asistirá a las personas pobres y miserables. Se empeñará para construir refugios y hospicios para la gente que tenía poco o nada. Ella, aún siendo alemana, estaba tan cerca del pueblo que en su mayor parte era polaco, que aprendió su idioma y sobre todo era tan sobria en sus modos y costumbres que abandonó de una manera sin precedentes todos los cánones de la moda que su noble rango le imponía. Eduviges no se avergonzaba de vestir ropa usada, zapatos viejos y fajas de cargador. La duquesa no quería distinguirse de los pobres, porque los pobres -decía ella- son "nuestros patrones".

La monja duquesa

Eduviges le compartió esta convicción a Gertrudis, la última de sus seis hijos y la única que le sobrevivirá. Los años que hasta entonces había vivido como esposa y madre habían sido turbulentos y atormentados. La duquesa, que apoyó fielmente a su marido en sus delicados deberes de gobierno, también vio morir jóvenes a los tres hijos y a dos de las tres hijas. Sus valores cristianos, mezclados con el rigor del tiempo que impedían las manifestaciones emotivas de sus penas, condicionaron a Eduviges para soportar muy fríamente el terrible dolor que la oprimía. Sin embargo, aunque no lloraba ni daba alguna muestra exterior en su sufrimiento, su estoico comportamiento no era sólo una cáscara vacía impuesta por los protocolos reales. Tenía en su interior el consuelo de la fe, de la oración intensa y diaria que con los años se transfomará en una clara atracción por la vida consagrada. En efecto, después de la muerte de su marido, para la viuda Eduviges era casi natural buscar y hallar un alivio en el monasterio cisterciense de Trebnitz, que ella misma fundó en 1202. La duquesa se consagró al Señor como monja y cuando murió, el 15 de octubre de 1243, nadie dudaba que una santa había concluído su luminoso camino sobre la tierra. Santa la proclamó Clemente IV en 1267.

Santo del 16 de octubre

Margarita nació en Borgoña en 1647 y a los 24 años entró con las Visitandinas. Recibió muchas apariciones de María y Jesús, que le pidió adorar su Sagrado Corazón e instituir universalmente su fiesta. Así sucedió gracias a ella. En su biografia se hallan las famosas promesas de Jesús. Murió en 1690.   Leer todo...
Gerardo fue un sastre desafortunado en la ciudad de Potenza pues su vocación era totalmente otra. Rechazado por los Capuchinos, fue aceptado por los Redentoristas y en el convento realizó las más humildes tareas. Soportó con ejemplar mansedumbre y paciencia las calumnias de una mujer. Murió en 1755.  
 

Oración del día:

 
"Ó s. Eduviges, duquesa de Polonia, religiosa, humilde siervo de Dios, que encontraste en la soledad y la oración la verdadera paz, intercede por nosotros ante el Señor. Ayúdanos a buscar la unidad y la fortaleza espiritual en medio de las tribulaciones, y guíanos con tu sabiduría hasta el corazón de la Santísima Trinidad. Amén."
 
Que en este día podamos reflexionar sobre la vida de s. Eduviges, duquesa de Polonia, religiosa y encontrar inspiración en su entrega total a Dios, especialmente en tiempos difíciles.
 

El Santo del Día: La Importancia de la Santidad Cotidiana

Cada día, la Iglesia Católica conmemora la vida de uno o más santos, recordando sus virtudes y su testimonio de fe. La tradición del "Santo del Día" nos permite conocer a quienes dedicaron su existencia a Dios, sirviendo con amor y devoción a la humanidad.
 

¿Quiénes son los santos?

Los santos fueron hombres y mujeres que, en su caminar por este mundo, se esforzaron por seguir fielmente las enseñanzas de Cristo. Algunos sufrieron el martirio por su fe, mientras que otros dedicaron sus vidas a la oración, la caridad y la evangelización. La Iglesia los reconoce como santos tras un proceso en el que se confirman sus virtudes y los milagros atribuidos a su intercesión.
 

La celebración del Santo del Día

Cada santo tiene un día especial de conmemoración, generalmente en la fecha de su fallecimiento, visto como el momento de su encuentro definitivo con Dios. Esta práctica nos invita a conocer más sobre sus vidas y a dejarnos inspirar por su testimonio de santidad.
 

Un propósito espiritual

Celebrar el Santo del Día no es solo un recordatorio histórico, sino también un llamado a la reflexión y a la oración. A través de su intercesión, podemos pedir fuerza y aliento para afrontar los desafíos diarios con más fe y esperanza.
 
Conocer la vida de los santos y celebrar su legado es una manera hermosa de fortalecer nuestra fe y encontrar modelos concretos de vida cristiana. Cada uno de ellos nos deja una enseñanza sobre perseverancia, amor al prójimo y entrega total a Dios. Que sus historias nos animen a vivir con más devoción y propósito, siguiendo el camino de Cristo en nuestro día a día.
📖 Evangelio de hoy
🙏 Vísperas
📅 Calendario Litúrgico