Santo del 25 de noviembre
Durante la persecución de Diocleciano, en 300, Pedro fue el obispo de Alejandría en Egipto, y por eso debió esconderse. En su ausencia su Comunidad sufrió un cisma. Fue encarcelado y martirizado en 311. Se le recuerda con otros tres santos obispos egipcios: los mártires Esichio, Pacomio y Teodoro.
Santo del 25 de noviembre
Durante la persecución de los cristianos bajo Decio, en el siglo III, el Decano del colegio sacerdotal de Roma era Moisés, quien se distinguió por su posición indulgente hacia aquellos que habían renegado de su fe para salvar sus vidas. Murió después de un largo encarcelamiento en el año 251.
En 1905 Luis y Maria Beltrame Quattrocchi se unieron por el sacramento del matrimonio cristiano. Supieron caminar juntos y como familia hacia la santidad. Por vez primera en la historia, S. Juan Pablo II beatificó una pareja de esposos. Su memoria litúrgica se celebra en la misma fecha de su boda.
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Leia tudo...La leyenda relata que ante el gobernador de Egipto y Siria, Maximino, Catalina en lugar de abjurar la fe convence a los dignitarios a convertirse en cristianos. Maximino los manda a matar y pide a la muchacha que se case con él. A su rechazo la hace matar en el 305. Su tumba está en el Sinaí.
Oración del día:
"Ó s. Pedro de Alejandría, obispo y mártir, humilde siervo de Dios, que encontraste en la soledad y la oración la verdadera paz, intercede por nosotros ante el Señor. Ayúdanos a buscar la unidad y la fortaleza espiritual en medio de las tribulaciones, y guíanos con tu sabiduría hasta el corazón de la Santísima Trinidad. Amén."
Que en este día podamos reflexionar sobre la vida de s. Pedro de Alejandría, obispo y mártir y encontrar inspiración en su entrega total a Dios, especialmente en tiempos difíciles.
El Santo del Día: La Importancia de la Santidad Cotidiana
Cada día, la Iglesia Católica conmemora la vida de uno o más santos, recordando sus virtudes y su testimonio de fe. La tradición del "Santo del Día" nos permite conocer a quienes dedicaron su existencia a Dios, sirviendo con amor y devoción a la humanidad.
¿Quiénes son los santos?
Los santos fueron hombres y mujeres que, en su caminar por este mundo, se esforzaron por seguir fielmente las enseñanzas de Cristo. Algunos sufrieron el martirio por su fe, mientras que otros dedicaron sus vidas a la oración, la caridad y la evangelización. La Iglesia los reconoce como santos tras un proceso en el que se confirman sus virtudes y los milagros atribuidos a su intercesión.
La celebración del Santo del Día
Cada santo tiene un día especial de conmemoración, generalmente en la fecha de su fallecimiento, visto como el momento de su encuentro definitivo con Dios. Esta práctica nos invita a conocer más sobre sus vidas y a dejarnos inspirar por su testimonio de santidad.
Un propósito espiritual
Celebrar el Santo del Día no es solo un recordatorio histórico, sino también un llamado a la reflexión y a la oración. A través de su intercesión, podemos pedir fuerza y aliento para afrontar los desafíos diarios con más fe y esperanza.
Conocer la vida de los santos y celebrar su legado es una manera hermosa de fortalecer nuestra fe y encontrar modelos concretos de vida cristiana. Cada uno de ellos nos deja una enseñanza sobre perseverancia, amor al prójimo y entrega total a Dios. Que sus historias nos animen a vivir con más devoción y propósito, siguiendo el camino de Cristo en nuestro día a día.